2012: ¿La tercera es la vencida?



Lenia Batres Guadarrama


Vamos a ganar, ya no cabe duda. Pero ¿nos van a respetar el triunfo?

El fantasma del fraude electoral nos persigue desde 1988. Cuando el pueblo ha optado por la izquierda, una poderosa élite político-económica se ha apresurado a impedir su ascenso a la presidencia. Ni en 1988 ni en 2006 fue suficiente la fuerza de los votos para afianzar el triunfo.

Al inicio de esta campaña, la posibilidad de otro fraude flotaba pesada en el ambiente de nuestros propios simpatizantes. No nos van a dejar llegar. Nos van a hacer trampa.

Entre más crece la presencia de Andrés Manuel López Obrador, más se mitiga ese gran temor, aunque persisten dudas en mucha gente.

Andrés Manuel hizo bien en incorporar en esta fase de la lucha electoral, la insistencia en que sólo el pueblo puede salvar al pueblo y que será el pueblo organizado el único que podrá impedir un nuevo fraude electoral.

Logró que permeara la necesidad de generar la estructura protectora que no logramos en 2006. La gente es muy consciente ahora de que nos corresponde cuidar los votos. Sabemos que el recuento voto por voto, casilla por casilla no será necesario si logramos garantizar el cuidado de cada urna.

Hay quienes insisten en que al sumar los votos se puede cometer el fraude y piden auditar el sistema de captura de los votos. Que estén tranquilos, les decimos, porque en un país en el que, aun con el Youtube, la memoria pública consta por escrito, la “verdad jurídica” está en las actas. Por eso, insistimos a quienes se anotan como representantes de casilla del Movimiento de Regeneración Nacional que no se preocupen de la captura, que nos concentremos todos en vigilar la jornada electoral, de principio a fin, garantizando que quede anotado cualquier acontecimiento sospechoso y que el conteo de sufragios se haga minuciosamente.

El criterio adoptado de suma de votos es complicado, porque serán válidos todos los votos para las coaliciones. Y si éstos están divididos se contarán en el fragmento que corresponda a cada partido.

Es muy importante, en estos días, terminar de capacitar a nuestros representantes. Imbuir la mística que significa su enorme contribución al cuidado de cada casilla electoral.

Hay, paralelamente a la estructura de vigilancia directa de Morena, otros esfuerzos que se están haciendo para evitar un fraude.

En primer logar, los jóvenes de #YoSoy132 que se anotaron como observadores para el proceso.

Igualmente, se han organizado intelectuales y académicos, entre los que se encuentran Lorenzo Meyer, Jonh Ackerman, Carlos Gershenson e Irma Eréndira Sandoval, a través de la creación del Frente Ciudadano en Defensa del Sufragio Efectivo, que promoverá el monitoreo ciudadano “Todos contamos”, “Foto por casilla” y el Observatorio Universitario Electoral, por medio de las redes sociales para detectar posibles actos de coacción y compra de votos y de dispendio electoral, principalmente.

¿Nos pueden hacer fraude por tercera ocasión? nos preguntamos todos. Sí, claro. Eso querrían, más si como está sucediendo, no les funciona la guerra sucia contra nuestro candidato. Pero ahora tenemos lecciones, instrumentos y condiciones mayores y mejores para defendernos. La organización popular, en principio.

Nos podrían hacer fraude, pero no lo vamos a permitir. La tercera es la vencida sin duda. 2012 es el año del gobierno del pueblo mexicano.

Revista EMET, 8 de junio de 2012.